Rosalyn Sphinx tomó un taxi para ir al aeropuerto y ella y el taxista se hicieron amigos de inmediato. Él descubrió que Rosalyn estaba tratando de convertirse en actriz y que su vuelo se canceló a mitad de camino al aeropuerto. Qué mierda. Afortunadamente, el taxista pensó que era linda y la invitó a su casa. Cuando llegó, pensó que era un lindo departamento, pero él acababa de mudarse, así que no había televisión ni internet. ¿Qué demonios se suponía que debían hacer? Este astuto taxista fue capaz de pensar en algunas ideas… Jugó hockey de amígdalas con su polla en la garganta de Rosalyn, luego la hizo montarlo hasta que la llenó de artilugios. ¡Esa podría ser la mejor tarifa que haya conducido jamás!Descargar Rosalyn Sphinx en ‘Taxi Driver Gets Some Teen Tushy’Descargar Rosalyn Sphinx en ‘Taxi Driver Gets Some Teen Tushy’