"Miedo" y "Precaución" no parecen serle familiares a Mckenzie Lee. Sabe muy bien que está en la parte peligrosa de la ciudad que la policía no visita después del atardecer. La pequeña posibilidad de que un resultado reciente en un motor de búsqueda pueda significar que sus agujeros están tapados es una posibilidad demasiado grande como para dejarla pasar. La única experiencia de Mckenzie Lee con el porno y el sexo interracial es a través del escondite secreto de su novio y ahora es el momento de vivir la fantasía. El maquillaje se aplicó solo después de que una búsqueda en su armario sacó ropa que se pegaba a su cuerpo apretado. El viaje a la gasolinera donde se encuentra este agujero glorioso significó que tuvo tiempo más que suficiente para reconsiderar el libertinaje por el que estaba a punto de pasar. Sin embargo, tenía la mente puesta en una gran polla negra y minutos después estaba dentro de un baño donde las chicas blancas han sido diezmadas por pollas negras anónimas. Las paredes que rodeaban a Mckenzie solo se sumaron a la excitación que estaba teniendo y cualquier duda restante que tenía se desvaneció como sus bragas y sujetador. Las sandías en su pecho casi le bloqueaban la vista mientras sus dedos se deslizaban profundamente dentro de su rezumante pene. Esperó a que apareciera la gran polla negra de la que hablaban otras chicas blancas mientras la idea de cómo sabría su primera polla negra la hacía empapar el inodoro debajo de ella. La gran polla negra que deseaba se deslizó a través del agujero en la pared y parecía no terminar nunca mientras cada centímetro entraba en su lado del cubículo. Finalmente, en la pulgada 13, pudo medir exactamente cómo succionar la monstruosa polla negra que tenía frente a ella. Las rodillas de Mckenzie Lee recogieron toda la suciedad y la mugre del suelo mientras su boca se deleitaba con una salchicha negra que era demasiado grande para devorarla por completo. Sin embargo, el coño de Mckenzie estaría a la altura de la tarea de recibir la enorme polla negra del gloryhole. Mckenzie se inclinó y las terminaciones nerviosas de su coño explotaron cuando la carne negra niveló su apretado coño. Las festividades terminaron cuando el coño de Mzkenzie colapsó por la embestida y su boca aceptó el maremoto negro que se avecinaba.Descargar Mckenzie Lee en ‘Mckenzie Lee – Glory Hole’Descargar Mckenzie Lee en ‘Mckenzie Lee – Glory Hole’