Leah Lee es una joven lujuriosa que ha estado enamorada de su amigo Brad Sterling durante tanto tiempo. Cuando finalmente surge la oportunidad de follar con Brad, Leah ni siquiera lo duda. Ella salta a sus brazos y envuelve sus brazos y piernas alrededor de ese hermoso cuerpo mientras se entrega a lo que Brad quiere. Llevando a Leah a una estantería cercana, Brad palpa ese fino culo y luego se estira para acariciar sus grandes pechos. Le quita la ropa a Leah lentamente, tomándose su tiempo mientras conoce el cuerpo caliente de su amigo. Leah no se avergüenza de sentir a Brad al mismo tiempo, ahuecando su erección e imaginando cómo se sentirá enterrado en su codicioso agujero de mierda. Cuando se trasladan al sofá, Leah se encuentra recostada y dejando que Brad haga el trabajo. Él la despoja de sus pantalones, luego de su tanga. Cuando todo lo que queda es el coño bien recortado de Leah, se inclina para probarlo y acelerar instantáneamente el motor de Leah. Ella enrolla sus manos en el cabello de Brad para mantener su lengua exactamente donde necesita que esté para llevarla a su primera visión del paraíso. Poniéndose de rodillas, Leah saca la tijera de Brad de sus jeans y hace lo que ha estado soñando hacer: abre la boca y toma su polla en su boca. Chupando con fuerza, disfruta del almizcle de una gran polla en su boca. Hacer una garganta profunda a Brad es un sueño hecho realidad, pero aún mejor que eso es cuando Brad ayuda a Leah a arrodillarse en el sofá para que pueda hundirse en ella por detrás. El estilo perrito toca muchos de los botones correctos, pero Leah se niega a conformarse con una sola posición después de esperar tanto tiempo. Ella se pone de espaldas y separa sus muslos tanto como sea posible en una invitación descarada para que Brad realmente se lo dé. Aceptando la oferta de Leah, Brad se sumerge profundamente mientras se moja la polla en ese pus goteante. Brad se sienta en el sofá a continuación para que Leah pueda darse un capricho aún más subiendo a bordo y dando un paseo en rigidez. Sus caderas se balancean hacia adelante y hacia atrás a un ritmo vertiginoso mientras Brad explora las curvas de su cuerpo con sus manos ansiosas. Al darse la vuelta, Leah va a la ciudad en vaquera inversa hasta que sus gemidos de puro deleite llenan la habitación. Saltando de la D, Leah se da el gusto con otro handie y BJ. Brad se recuesta y la deja ir a la ciudad en su palo de mierda hasta que no puede contenerse un momento más. Cediendo a su placer, se vuelve loco por toda la mano y la boca de Leah para que ella pueda lamerlo mientras traga su semilla.Descargar Leah Lee en ‘It Finally Happened – S37:E23’Descargar Leah Lee en ‘It Finally Happened – S37:E23’