Lola Mai en Kink ‘Tormento implacable’

Lola Mai es el tipo de carne fresca sumisa y núbil que anhela El Papa. Lola se entrega por completo a los apetitos sádicos de su amo dominante. El Papa no pierde el tiempo y comienza el día estirando su juguete sexual en una posición de pie rigurosa con la espalda arqueada sobre un barril de madera y los brazos atados por encima de la cabeza con una cuerda ineludible. Lola es atormentada implacablemente con todos los juguetes de impacto en la mazmorra. Primero con un pesado látigo de cuero, luego con una porra con peso, seguido de un látigo de cola única que muerde y concluye con los enormes puños masculinos del Papa. Podemos escuchar toda su caja torácica golpear y temblar mientras su amo la golpea una y otra vez. Lola ruega por más atención y más dolor. El Papa está más que ansioso por complacerlo y cada vez que revisa el pequeño y apretado coño de su juguete, lo encuentra empapado de placer. Lola es una zorra que siente puro dolor. A continuación, vemos a Lola brutalmente atada y agachada con su perfecto culo redondo a la vista. El Papa cosifica sin piedad su trasero y lo castiga con severos juegos corporales y de impacto. Utiliza todos los instrumentos a su disposición: manos, puños, bastón, paleta y porra, para provocar un doloroso deleite con su juguete sexual cautivo. El culo de Lola irradia el tono rosado perfecto de un juguete que se ha utilizado correctamente. Para terminar el día, esta zorra ansiosa se ha ganado su recompensa. El Papa la pone de rodillas con los brazos y las piernas bien sujetos e inmovilizados. Aplica varias capas de cuerda alrededor del frágil cuello de Lola y lentamente lo levanta con un polipasto. Su mascota puede respirar, pero solo lo suficiente para raspar y suplicar más tormento y el éxtasis que surge de la brutalidad de la atención dolorosa y la validación salivante. El Papa le venda los ojos a su juguete y luego le aplica repetidamente descargas eléctricas en cada parte del cuerpo con los poderosos golpes de una picana gigante. Lola jadea, gime y se estremece de placer cada vez que es castigada con el juego de electricidad. Finalmente, el Papa queda satisfecho con los sacrificios carnales de su juguete y coloca un vibrador sobre el clítoris hinchado y palpitante de Lola. Ella ruega correrse, pero el Papa se lo niega hasta que se pierde en lo más profundo del subespacio y suplica liberación sexual. Y, justo cuando está al borde del éxtasis, el Papa le permite correrse y la deja jadeando y sudando en un montón de placer.Descargar Lola Mai en ‘Relentless Torment’Lola Mai in 'Relentless Torment'Lola Mai in 'Relentless Torment'Lola Mai in 'Relentless Torment'Lola Mai in 'Relentless Torment'Lola Mai in 'Relentless Torment'Lola Mai in 'Relentless Torment'Lola Mai in 'Relentless Torment'Lola Mai in 'Relentless Torment'Lola Mai in 'Relentless Torment'Lola Mai in 'Relentless Torment'Lola Mai in 'Relentless Torment'Lola Mai in 'Relentless Torment'Lola Mai in 'Relentless Torment'Lola Mai in 'Relentless Torment'Lola Mai in 'Relentless Torment'Lola Mai in 'Relentless Torment'Lola Mai in 'Relentless Torment'Lola Mai in 'Relentless Torment'Lola Mai in 'Relentless Torment'Lola Mai in 'Relentless Torment'Lola Mai in 'Relentless Torment'Lola Mai in 'Relentless Torment'Lola Mai in 'Relentless Torment'Lola Mai in 'Relentless Torment'Lola Mai in 'Relentless Torment'Lola Mai in 'Relentless Torment'Lola Mai in 'Relentless Torment'Lola Mai in 'Relentless Torment'Descargar Lola Mai en ‘Relentless Torment’

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *