Mi esposa Daisy Monroe es una zorra muy caliente. El otro día cenamos con mis padres y yo era un poco perezoso, así que Daisy hizo un trato conmigo: “Te haré una mamada rápida si te metes en la ducha justo después y te preparas”. Tuve que aceptar su invitación después de ver lo que llevaba puesto, el leggin de cuero rojo más ajustado de todos los tiempos y su trasero estaba tan jugoso en él. Se puso de rodillas y me hizo una mamada fantástica, incluso la follé durante un minuto. Es la puta más grande que conozco y la amo, mi hermanito siempre la pareció porque creo que sabe lo que hace para vivir. Bueno, me corrí cubrí su cara con semen, espero que mis padres no vieran la mancha de semen alrededor de su cara. 🙂Descargar Daisy Monroe en ‘Daisy Monroe Slut Wife’Descargar Daisy Monroe en ‘Daisy Monroe Slut Wife’