Daisy Ducati tiene un marido en casa, pero su polla no le sirve. A él le basta con pagar las facturas, pero ella necesita una polla de toro gruesa y dura para satisfacer su apetito sexual y su marido debería aceptarlo. La espía con el semental que trae a casa del bar e incluso le acaricia su pequeña polla, pero Daisy lo pilla y lo obliga a unirse a la diversión. Jay le lame los pies, chupa la polla del semental y chupa el clítoris de Daisy mientras ella se deja follar con la enorme polla del semental. ¡Todo el jugo sexual gotea en su boca y ella masturba a su semental en la cara de su marido!Descargar Daisy Ducati en ‘Daisy Ducati: The Cuckoldress’Descargar Daisy Ducati en ‘Daisy Ducati: The Cuckoldress’