El coche de Bella Rolland se descompone de camino a su llamada de botín. Cachonda y derrotada, decide descargar su frustración sexual en un buen samaritano que la recoge. Después de que él se corre y la deja en el garaje más cercano, Bella decide que todavía está de humor. Por suerte para Bella, los mecánicos del garaje, Taylor Gunner y Scott Nails, la saludan con los brazos (y las piernas) abiertos.Descargar Bella Rolland en ‘Oiled and Spoiled at the Garage’Descargar Bella Rolland en ‘Oiled and Spoiled at the Garage’