La pequeña gatita sexual Alexa Nova hace su primera aparición en la mazmorra sádica del Papa. Su cuerpo delgado y frágil se dobla hacia atrás en un arco trasero extremo que tira de su piel pálida y la deja vulnerable a las malas intenciones del juego de impacto sádico. El Papa trabaja la parte delantera de su cuerpo atacando sus alegres pezones y pequeñas tetas naturales con un pesado látigo de cuero. Ella se retuerce y grita de dolor mientras intenta evitar sus crueles intenciones. Pero la esclavitud es implacable e ineludible y cada golpe envía ondas de choque de dolor que recorren su pequeño cuerpo. A medida que el dolor aumenta, su coño reacciona humedeciéndose de deseo. Esta zorra del dolor no quiere nada más que complacer a su manejador masculino y hacer lo que él le diga que haga. Pero esto no se trata de lo que ella quiere y se somete a los deseos depravados del Papa. Su rabia alcanza un pico frenético mientras su cuerpo cuelga indefenso de la esclavitud de metal y entonces él mete un hitachi en su coño ávido y observa con éxtasis como su cuerpo se espasma incontrolablemente por los orgasmos no deseados. El Papa luego arroja a su mascota al suelo y le abre las piernas de par en par. Renueva su ataque a sus pezones y se ríe mientras ella aúlla de dolor. Ella suplica misericordia y él la obliga enterrando un trozo de metal desafilado en las grietas más sensibles de sus pies. Ella grita y sus pies se espasman como las aletas indefensas de una foca atrapada, pero no hay escapatoria del amor del Papa por el dolor de las chicas indefensas. Él se ríe mientras las lágrimas brotan de las comisuras de sus ojos y se enfurece cuando ella grita de dolor por los orgasmos múltiples. Tan pronto como está satisfecho con atormentar sus tiernos pies, la da vuelta y la coloca en una posición en cuclillas que hace que su trasero firme y tonificado sobresalga. Luego le pega y le da nalgadas en el trasero hasta que se pone rojo brillante. Alexa gime en voz baja y ahogada, dando las gracias, mientras las enormes manos del Papa abusan de su joven y diminuto cuerpo. Y cuando ella no puede soportar otro momento de abuso, él mete sus enormes manos de hombre en su pequeño coño rosado y arranca orgasmo tras orgasmo de su reacio agujero de puta.Descargar Alexa Nova en ‘Petite Slave Alexa Nova Locked in Metal Bondage and Tormented Orgasms’Descargar Alexa Nova en ‘Petite Slave Alexa Nova Locked in Metal Bondage and Tormented Orgasms’