Cada vez que Camila Luna tiene la oportunidad de lucir sus líneas de bronceado, la chica sudamericana no duda en encharcar su ropa en el suelo para poder pavonearse con orgullo esas líneas de bikini. Una vez que está desnuda, ¿qué sentido tiene volver a ponerse la ropa hasta que haya disfrutado de un poco de masaje personal?