La tatuada Rosalyn Sphinx no es la primera vez que explora su cuerpo caliente. Le encanta darse placer a sí misma y alcanzar orgasmos que sacuden la tierra. Pero cuando la curiosa belleza Angel Ryder se topa con la sesión de masturbación privada de Rosalyn, se sorprende y asombra. Rosalyn quiere mostrarle a Angel que la curiosidad puede ser algo bueno, por lo que le propone que se diviertan un poco experimentando. Mete sus dedos en el coño de Angel y lame su clítoris lascivamente. Angel no puede creer lo bien que se siente cuando Rosalyn sacude su mundo con su lengua. Luego, las dos frotan sus coños contra un vibrador, ¡haciéndose correrse con fuerza! Parece que este experimento es un éxito...