A Rebecca le encanta trabajar duro, pero le gusta más divertirse, y cuando está de vacaciones, no deja que nada la detenga. Estas vacaciones las ha llevado a un nivel completamente diferente: tiene algunos amigos de la universidad y una semana de fiestas para disfrutar. Habiendo reservado un vuelo un día antes que el resto, tiene un poco de tiempo para relajarse antes de que comience la diversión y, teniendo en cuenta que la aerolínea ha perdido su equipaje, se encuentra tomando sol desnuda, con un extraño atractivo que le asegura que no se aburrirá mientras espera.