Rachael Cavalli ha estado viendo a un terapeuta para que la ayude con su adicción al sexo. Después de que termina su sesión, su terapeuta sale a buscar a su próximo paciente, pero mientras ella se ha ido, el nuevo paciente, Manuel, aparece y piensa que Rachael es su terapeuta. El problema de Manuel es que no puede dejar de tener erecciones todo el tiempo, vaya donde quiera que vaya siempre se pone una erección cada vez que ve a una chica. Rachael comienza a frotarse mientras Manuel le cuenta su problema y decide que lo va a ayudar con su problema. Ella saca sus grandes tetas y se quita la ropa mientras Manuel entierra su cara entre sus piernas. Rachael decide hacer un poco de terapia oral y saca la gran polla de Manuel, luego la lame y la chupa hasta que está bien mojada. Ella acuesta a Manuel en el sofá y salta encima para montar su enorme carne de hombre. Manuel no tiene idea de que Rachael no es su terapeuta, pero a estas alturas no creo que le importe. Rachael termina la sesión chupando de nuevo la enorme polla de Manuel y bajando su carga por su acogedora garganta.