Miami está en su habitación tan cachonda como podría estarlo. Sus juguetes no lo están haciendo por ella. Recuerda que su padrastro Yanick está en casa y va a solicitar su ayuda. Ella le dice con vergüenza que está súper cachonda y quiere follar. Yanick le dice que es una mala idea y que no puede hacerle eso a su madre. Miami le dice que si follan no solo lo mantendrá en secreto, sino que se tragará su semen, por lo que no hay evidencia. Yanick no podía decir que no a eso. Miami saca su enorme polla y no puede creer lo grande que es. Ella se mete todo lo que puede en la boca, luego él se lo mete en su apretado y joven coño. Tan fuerte que se corre en los primeros golpes. Miami se lo come como ella dijo y él vuelve a golpear su agujero cachondo. Él se corre de nuevo en su boca y, como prometió, ella traga de nuevo. Ella está muy agradecida y Yanick está preparada para follar su buen coño toda la noche.