Medusa se dirige a su primera sesión de fotos como modelo. Nunca lo había hecho antes, pero su fotógrafo Alberto la hace sentir muy cómoda y es bastante alentador. Consigue todas las fotos con ropa que se requieren, además de algunos desnudos súper picantes adicionales. ¡Esta sesión resultó ser un gran éxito! Además, Alberto promete darle el número de Medusa a algunos de los mejores contactos de agencias que tiene. Tiene que haber una trampa, ¿verdad? Correcto. Alberto le pide a Medusa que le agradezca de antemano, lo que suele ser arriesgado ya que a veces la gente nunca cumple con su palabra, pero decidió hacerlo de todos modos. Se puso de rodillas para chupar ese chorizo. Luego se abrió de piernas mientras rebotaba en su polla. Al final del día, Medusa se quedó con la boca llena de semen, una copia digital de sus fotos y grandes esperanzas de que Alberto hiciera lo correcto y le diera su contacto a todas las personas adecuadas. ¿Se volverá famosa? Sólo el tiempo dirá.
