Marina Maya es una malcriada que siempre consigue lo que quiere. Una sola llamada a su papá es todo lo que necesita hacer para que cualquiera a su alrededor cumpla sus órdenes. Brian Ragnastone estaba harto de la actitud de Marina, así que quería castigar a la pequeña zorra. Brian le da a Marina un beso apasionado antes de comerse su coño calvo. Se deleita con el sabroso coochie de la puta rica como si fuera una comida lujosa. Marina se pone de rodillas y le hace una mamada descuidada a Brian. La pequeña nena no puede evitar gemir mientras Brian se la folla en misionero y cuchara. Sus pequeñas tetas rebotan con fuerza mientras monta la polla de Brian en vaquera invertida. Brian se folla incansablemente a la hija de su jefe al estilo perrito antes de correrse en su cara.
