La pequeña Luna Daniels está cansada de vivir en la casa de sus padres, especialmente porque el refrigerador nunca está lleno y nunca hay nadie en casa. Le pregunta a su sugar daddy si puede quedarse con él por un tiempo, y el grandullón está más que feliz de complacerla. Para que sus padres sepan que está a salvo y feliz en la casa de su hombre, hace un pequeño video POV con él. Pero una vez que la cámara está encendida, la excitación de Luna toma el control. Ella cae de rodillas y sorbe su gran eje, y él le come el coño y hunde su polla en su pequeño coño.