Las mejores amigas Leah Gotti y Violet Voss estaban descansando en casa cuando decidieron jugar un pequeño juego de “Yo nunca he”. Las cosas se intensificaron rápidamente ya que ambas chicas estaban claramente súper cachondas y parecía la oportunidad perfecta para experimentar... Cuando fue innegable que ambas lo querían, Violet trajo su consolador y folló a Leah como loca, haciéndola correrse tan fuerte que ambas supieron que no sería la última vez que follarían.