Laya quiere quitarse los brackets con todas sus fuerzas, pero para lograrlo tiene que convencer a su padrastro de que hable con su madre. Su padrastro no quiere saber nada y sabe que se meterá en problemas con su madre, que pagó mucho dinero por los brackets. Laya hará lo que sea para convencer a su padrastro de que se los quite. Empieza haciéndole una mamada larga y experta a su padrastro, seguida de ser follada junto al fregadero de la cocina. Más tarde, su padrastro la lleva a la sala de estar para follarle el coño apretado en todas las posiciones posibles hasta que se corre sobre sus brackets.