Lana se está estirando en la sala de estar para hacer un poco de yoga. Cree que está sola en la casa y se desnuda por completo. Mick la encuentra y la observa en silencio. Comienza a masturbarse con su increíble cuerpo. Lo atrapan, pero explica que simplemente no pudo evitarlo. Ella decide divertirse un poco con él. Lo arroja al sofá y comienza a chuparle la polla. Esto es todo lo que él quería. Ella frota su coño en su polla y le ruega que se la meta por el culo. Tienen un sexo anal increíble y ella no puede dejar de gritar. Le encanta. No quiere parar hasta que se le llena la boca de semen.