Tienes que estar realmente atrapado en tu lujuria para ni siquiera entrar en tu habitación para una noche de sexo caliente. Gina Russel modeló su nueva lencería para su hombre Timo, y ver el material transparente del negligee caer sobre sus caderas lo entusiasmó. Timo se levantó de la cama y se encontró con ella en el pasillo para rodearle la cintura con las manos y plantarle un profundo beso en la boca. Gina se dio la vuelta mientras Timo besaba su cuello y acariciaba su cuerpo, antes de caer al suelo para tomar su polla en su boca. Envolviendo su pierna alrededor de la cintura de Timo, Gina desliza su polla profundamente dentro de ella, disfrutando cada centímetro de su miembro. Después de haber tenido suficiente de eso, Gina se sentó a horcajadas en el regazo de Timo y lo montó en su vaquera mientras sentía un intenso orgasmo acumulándose en su entrepierna.
