"No hago alarde de lo que tengo", me dijo una vez Cindy Cupps. "Camino con ropa normal. Si los chicos me miran, me miran fijamente. Si los chicos piensan que soy sexy, genial. Es genial para mi autoestima, pero no es como si estuviera caminando con un gran chip en el hombro, como, 'Oh, estoy caliente'. Yo no hago eso".