Brooklyn tiene una larga historia con el sacerdote de la iglesia. Es complicada y compleja, y ahora Brooklyn se está dando cuenta de que tal vez las cosas han durado demasiado tiempo. Tal vez sea hora de terminar el ciclo que ha envuelto su vida durante tanto tiempo. Esto va a ser más difícil de lo que parece, pero Brooklyn sabe que algo tiene que cambiar, porque ya es suficiente. Christian, su sacerdote, no va a liberar a una de sus feligresas tan fácilmente, especialmente a una que es tan sexy como Brooklyn. Le hace una visita a Brooklyn y las cosas rápidamente toman un giro inesperado, y no el que Brooklyn estaba buscando. Para controlar la situación, Christian deja a Brooklyn indefensa con ataduras mientras usa su cuerpo exactamente como siempre lo ha hecho. El tormento y el control le muestran a Brooklyn cuánto la ama, incluso si Brooklyn no puede verlo.
