Lynn Vega está harta de que la novia de su hijastro se escabulle de su casa a todas horas de la noche. Es la última gota que despierta Anya Ivy, y decide que es hora de pasar a la acción. Después de interrogar a Anya sobre chupar a su hijastro, no volverá a la cama sin conseguir algo para ella. La señora Vega quiere esas tetas turgentes en su boca, y quiere lamerle el coño aún más. Si la Sra. Vega estará despierta toda la noche, Anya hará que valga la pena.